Zortzi konpainiak parte hartu dute Covid-19k antolaketa-irtenbide berriak eskatu dituen urteurren honetan
El sábado 4 de septiembre se abre el telón de la décima edición del Atauri Art, que vive su jornada entre bambalinas ultimando la infraestructura de la primera jornada del festival. Será esta vez para tres escenarios distintos -Sanbado, Atauri y Korres- a donde de manera itinerante regresa este cartel. La firmarán Zurrunka Teatro y Colectivo Monstrenko bajo un título muy familiar escribiendo estas mismas líneas, Ctr Alt Supr. Se trata de una reflexión desde el teatro del absurdo, sobre los nuevos modelos productivos, protagonizada por Andrés Bezares y Eñaut Elorrieta bajo la dirección de Jason Guerra.
La primera función será en este formato microteatro, de 25 minutos de duración «con poco aforo (unas 30-40 personas) y en principio pensada para la gente de estos pueblos, un poco en plan petit comité», justificaba así Xabi Orive el hecho de que no se den más referencias de horas ni lugares concretos. «Cada pueblo gestionará la afluencia a su modo, no queremos que se llene de gente el pueblo en cuestión y haya gente deambulando». Así pues actuaciones de mediodía, tarde y tarde noche en Atauri, Sabando y Korres y en cada localidad la vecindad sabrá de ellas por el boca a boca.
A pesar de las circunstancias, Arratiandi Kultur Elkartea y Bapatean Zirko, la organización del programa, han querido regresar de nuevo a la itinerancia de espectáculos entre pueblos pequeños de Arraia-Maeztu «por la propia filosofía de Atauri Art». Es una pirueta más, un ejercicio del «más difícil todavía» al que Atauri Art está ya acostumbrado tras diez años de sacar adelante su propuesta de teatro y circo para todos los públicos desde un pueblo de 20 habitantes. «Antes fueron la falta de apoyos y subvenciones, ahora que estábamos asentados, las dificultades nos las plantea la Covid… ha sido como un vuelta de tuerca más, un reto más probando nuestro empeño de traer la cultura a los pueblos», reconocía Orive.
Es un argumento de valor para vestir este décimo aniversario. Un año donde la ilusión, la magia de la escena seguirán siendo recompensa y fruto de un auzolan cultural. Nunca de más resaltar que el corazón de este festival es el núcleo popular de unas 30 personas voluntarias que desde hoy mismo se encargan de recibir y preparar las sillas para el público o preparar los distintos escenarios, entre otras labores logísticas. No hay que olvidar también que el festival ha ampliado poco a poco su nómina de colaboraciones, además de las institucionales locales y provinciales, de empresas de la zona, entre las cuales está Natouring, turismo, comunicación y medio ambiente, editora de este blog.
Cuatro jornadas más de funciones
A partir de este primer sábado de función, el cartel nos lleva a un segundo finde completo de espectáculos en Zumalde. El viernes 10 , el grupo leonés Cirk About It pondá en escena Un día de cine, una invitación a acompañar a dos apasionados del cine a su primera película en 3D. El sábado 11 comenzará con un cuentacuentos a cargo de Odei Arregi. Por la tarde doble función circense: el grupo Mala Brigo representa la obra De algodón y caucho. Y la compañía Maintomano continuará con Kaldi. Este fin de semana intenso se cierra el domingo 12, en Apellaniz, donde la compañía Zirika Zirkus, lleva a escena el espectáculo Hemendikara. Hay una última actuación que nos remite al 15 de octubre y a un espacio en este caso cerrado, el centro sociocultural de Maeztu. Ahí estará la compañía de Santander de Ruth Garreta para ofrecer Oumuamua 2.0.
Para el cierre de esta edición, espera Orive, quizás podamos sumar alguna entrada más con las nuevos aforos aprobados. Por eso no hemos sacado de momento entradas». Las que están disponibles para los tres espectáculos de Zumalde de los días 10 y 11 se pueden reservar a través de la web entradium. En Apellániz no hay entradas y el espectáculo será de acceso libre. Y una de las cosas que sí vuelven este año, las esperadas pizzas y hamburguesas que elabora Mendialdeko Ogia.